DESDE OFICINAS CONTABLES DEL CSE DIRIGÍAN OPERACIONES DEL “ORDEÑO Y LAVADO”
III Entrega
Fábrica de robos
Luis Galeano y José Adán Silva | Nacionales
El manojo de facturas que el CSE, dirigido por Roberto Rivas, mandó a hacer de decenas de negocios reales que nunca vendieron bienes al Poder Electoral, y de otros negocios inexistentes para soportar los millones que se emitieron en anticipos a justificar, de Mauricio Fernández Mayorga. A la derecha, el contador general del CSE, Orlando Thomas Fúnez, captado en uno de varios vídeos que END tiene en sus manos, mientras revisa una de las decenas de facturas falsas.
Las fraudulentas operaciones en el Consejo Supremo Electoral para justificar C$ 407 millones extraídos por órdenes del magistrado Roberto Rivas Reyes, bajo la modalidad “anticipos por justificar”, se dirigían y organizaban desde las oficinas de contabilidad de ese Poder del Estado, según información obtenida por EL NUEVO DIARIO.
De acuerdo con la información, sustentada en testimonios y en tres vídeos filmados que logró obtener END, personal de contabilidad y administrativo del CSE se reunía en sesiones de trabajo para hacer cuadrar, por órdenes del hoy presidente fáctico de esa entidad, las cuentas de los cheques que se emitían bajo la modalidad de “anticipos por justificar” a nombre de personal de confianza de Rivas Reyes.
Entre 2004 y 2008, el magistrado Rivas ordenó que de las arcas del CSE se emitieran C$407 millones en cheques a nombre de Mauricio Fernández Mayorga, Bertha de la Peña, Amanda Montiel, Rodrigo Barreto, Leandro Delgado, y a su propio nombre, que luego personal de contabilidad se encargaba de justificar mediante la falsificación de facturas, recibos, sellos de negocios establecidos, o simplemente mediante la invención de falsos negocios que reportaban como vendedores de bienes y servicios al CSE. Todo ello ha sido sustentado por la investigación de END.
De acuerdo con los testimonios, los cheques se emitían por órdenes de Rivas, Mauricio Fernández los hacía efectivos en Banpro Portezuelo, donde el CSE tiene parte de sus cuentas, el cash se convertía a dólares y se le entregaba a las asistentes de Rivas.
Es aquí donde entraba el personal de contabilidad. Con la presión de tiempo, tenían que justificar la ejecución presupuestaria anual, y recurrían a inventar los soportes, presuntamente con operadores de compras, corredores de servicios y proveedores del CSE.
34 córdobas convertidos en 59 mil, como los votos
Ejemplo documentado: el CSE justificó un cheque de sus cuentas estatales como pago de deuda por compra de cuadernos y productos de oficinas por C$59,000 a Ferretería Richardson.
De acuerdo con documentación de justificación de cheques, el 31 de julio de 2008 el CSE adquirió 150 cuadernos universitarios, 100 cuadernos rayados gruesos, 256 notas adhesivas y 117 bitácoras para registros. El soporte fue la factura 582304 de Ferretería Richardson que, dicho sea de paso, no vende productos de oficina.
END investigó que la factura 582304 que legalmente emitió el citado negocio, en realidad se trató de una compra de C$33.84, de la compra de un par de baterías alcalinas AAA marca Panasonic. Como se ve, una práctica que la ha trasladado a la hora de contar los votos, donde abulta cifras insignificantes del partido de su conveniencia, hasta los extremos de convertir a perdedores en ganadores.
El cliente que pagó la original cantidad se identificó como Néstor Alvarado, y la transacción se realizó el 3 de octubre de 2008.
También se confirmó la falsificación de papelería de 22 empresas existentes para justificar compras en 37 operaciones del CSE en 2008, así como la invención de 15 negocios que “vendieron” bienes y servicios al CSE.
Un director de orquesta
El director de la orquesta de la elaboración de facturas falsas y de la justificación de las mismas para hacerlas cuadrar con los gastos del CSE, era el contador general de esa entidad, Orlando C. Thomas Fúnez (OCTF), quien se reunía con tres o cuatro personas que se encargaban de llenar a mano las facturas siguiendo sus orientaciones.
END tiene varios vídeos sobre las reuniones, y extrajimos de ellos varios fragmentos que se daban mientras limpiaban cuentas.
Los diálogos
“¿Esto es lo que me vas a entregar?, pregunta Thomas Fúnez a una mujer que lo recibe en un cuarto celeste. “Sí, es lo que tenemos hasta ahora”, responde ella.
-- Son 23.9 (millones de córdobas) — dice ella.
-- ¿Sólo de elecciones? Buscate una bolsa o un sobre de manila para llevármelo… con una bolsa está bien, sólo para que no se desparramen --dice él.
--“¿Alcanzan?”, pregunta de pronto una voz masculina que le pasa la bolsa al contador, a lo que Thomas responde: -- “Vamos a ver, creo que sí, alcanzó Pilatos en el Credo… (aquí) vamos a acomodarlas”, ordena OCTF.
-- ¿Qué van a trabajar para el martes?”, pregunta el contador, y la voz femenina responde: “Publicidad”.
Thomas Fúnez mueve la cabeza afirmativo y dice: -- “Papel de escritorio y cartón ya está listo, porque nosotros ocupamos cantidades navegables de papelería tamaño carta, tamaño legal, el 11 por 17 para planillas y las resmas, solo la gente de Informática pide de una sola vez 1,500 resmas para imprimir sólo el Padrón, y normalmente se compran 300 resmas mensuales de tamaño carta para abastecer a todas las oficinas a nivel nacional”.
La voz masculina lo interrumpe y le dice: -- “Pero es que ni con esa cantidad nos cuadran las cosas, porque tenemos cheques de hasta 135 mil y hasta 300 mil córdobas”.
OCTF: “Miren, Verificación Electoral significa que hay que imprimir todo el Padrón Electoral, es decir el de pared, de mesa, y sólo ahí son 1,500 resmas de papel, y en las actividades de capacitación se ocupan más resmas, unas 600 resmas de papel, cuando vienen elecciones se vuelve a imprimir el Padrón, así que cuando hay elecciones vos podés meter tranquilamente 6,000 resmas de papel durante ese período, durante el año, y meter más tamaño carta, porque es la que se usa más. Eso es el renglón 341, ahí cabe”.
Bromas y risas
Prosigue: “Lo que gastaron en llantas, ya lo gastaron. ¿Que por qué tantas llantas? ¡Hombré, porque me dieron más para llantas! Así de sencillo, a menos que no crean y que se vayan a buscar si tenemos alguna empresa distribuidora de llantas de tanta compra”, dice riendo Thomas Fúnez, sabiendo que los auditores gubernamentales no llegan hasta ese punto, y se oye en el cuarto las risas de los otros presentes.
Luego de unos minutos revisando documentos, Thomas Fúnez levanta la cabeza y se dirige a alguien: “No han metido llantas de motos, nosotros tenemos como 100 motos a las que se les cambia llantas hasta dos veces al año, y eso que tenemos guardadas como 50 motos nuevas, son Yamaha, y otras son unas chinas, mensajeras, pero a esas no les vamos a poner llantas nuevas”, dice riendo.
La voz de varón le explica: -- “Pero don Orlando, ni así cuadran”. El contador responde: -- “Si yo le dije a él (el otro presente en la conversación) que con la cartera que le di completen y que luego me llamen para ver el trabajo que sigue”.
“Miren” –-recomienda—“en publicidad pueden meter invitación de gente a cedularse, a acercarse a su Junta Receptora de Votos a verificarse, cosas como esas, y para las que se hacen bastantes volantes, porque es para todo el país. Además, para capacitación hacen afiches y hacen unos manualitos, para el proceso de verificación, transmisión de resultados, además, pueden poner perifoneo…, eso se hace en todos los municipios”.
Regañados por atraso y por falta de destreza…
La voz femenina le dice que están haciendo de todo para ponerse al día en el trabajo, “pero usted sabe que hay unos que son más boluditos que otros y eso afecta”.
OTF: “Entonces pónganse metas, de cien cheques que van a trabajar, distribuyan veinticinco cada uno para que sepan balancearse, porque se debe trabajar rápido y tratando de cometer los menos errores posibles. Bueno, ustedes porque al inicio no estaban tan compenetrados, pero ahora ya van cuesta abajo y 2009 va a ser más fácil, porque 2009 es poco, y como ya están familiarizados…”, corta la idea.
-- “De 2009 lo que voy a sugerir es que cuando terminen, ya empiecen a trabajar para que no se atrasen, porque lo que pasa es que cuando ya han ejecutado todo, ‘el señor’ empieza a buscar cómo justificar, y cuando ve un volumen, en montos, son de más de 200 millones de córdobas en 2008 que se deben justificar”.
Los cuidados con los enredos
En los vídeos se observa a Thomas Fúnez cuidando con esmero que todo cuadre, y que los rubros reportados con las facturas inventadas no se contradijeran con la realidad.
“Miren, aquí hay una cosa, por ejemplo, que no se puede dar… Aquí hay esta factura. Dice 30 barriles de cloro puro por 185 córdobas, y aquí hay otra que dice dos galones a 65 córdobas, esto no se puede poner, así porque un barril tiene 55 galones ¿ya? Lo que se puede poner es barrilitos de cinco galones cada uno, y ahí sí sale más o menos o pueden aumentar las cantidad de galones para no descuadrar la factura”.
¡Cuidado con repuestos!
“Acá hay una factura de los Pellas que dice ventiladores de Isuzu, termostato de Isuzu, dos juegos de sellos o empaques de overhol de Nissan Patrol, no estoy muy seguro que esta gente venda esto, porque Pellas venden Suzuki y Toyota, pero Isuzu no, porque eso lo vende Mántica, Nissan es el Grupo Q, y ustedes lo que pueden hacer es que esos repuestos de Isuzu los pongan a negocios como Súper Repuestos, porque los Pellas y Grupo Q son los que venden repuestos originales”.